lunes, octubre 16, 2006

Bichos Forenses

En civilizaciones antiguas, las moscas aparecen como amuletos (Babilonia, Egipto), como dioses ( Baalzebub , El Señor de las Moscas), y es una de las plagas en la historia bíblica del Éxodo. La metamorfosis de las moscas ya era conocida en el antiguo Egipto, pues un papel encontrado en el interior de la boca de una momia contiene la siguiente inscripción: "Los gusanos no se volverán moscas dentro de ti" (Papiro Gized nº 18026: 4: 14). La mayoría de los insectos evitados en los embalsamamientos son los que ahora nos ayudan en la resolución de los casos de muerte ( Greenberg , 1991).
El primer documento escrito de un caso resuelto por la entomología forense se remonta al siglo XIII en un manual de Medicina Legal chino referente a un caso de homicidio en el que apareció un labrador degollado por una hoz. Para resolver el caso hicieron que todos los labradores de la zona que podían encontrarse relacionados con el muerto, depositasen sus hoces en el suelo, al aire libre, observando que tan solo a una de ellas acudían las moscas y se posaban sobre su hoja, lo que llevó a la conclusión de que el dueño de dicha hoz debía ser el asesino, pues las moscas eran atraídas por los restos de sangre que habían quedado adheridos al ‘arma' del crimen.

Los parámetros médicos son utilizados para determinar el tiempo transcurrido desde la muerte cuando éste es corto, pero después de las 72 horas la entomología forense puede llegar a ser más exacta y con frecuencia es el único método para determinar el intervalo postmortem.

1.-Distintas fases del crecimiento de las Larvas.

2.-Sobre heridas aparecen con mayor rapidez.

3 y 4.-Distintos tipos de dípteros.

5.-En un cadaver se observan las larvas.

6.-Los huevos son aproximadamente de 2mm de longitud.

Después de la muerte, hay dos grupos de fuerzas postmortem que cambian la morfología del cuerpo. El primer grupo incluye aquellos factores que vienen desde fuentes externas como crecimiento bacteriano, invasión del cuerpo por los insectos y mordeduras de animales. El segundo grupo está compuesto por factores que proceden del interior del cuerpo, como el crecimiento de bacterias intestinales que aceleran la putrefacción y la destrucción enzimática de los tejidos.

Existen dos métodos para determinar el tiempo transcurrido desde la muerte usando la evidencia de los insectos. El primero utiliza la edad de las larvas y la tasa de desarrollo, y el segundo método utiliza la sucesión de insectos en la descomposición del cuerpo. Ambos métodos se pueden utilizar por separado o conjuntamente siempre dependiendo del tipo de restos que se estén estudiando. Por lo general, en las primeras fases de la descomposición las estimaciones se basan en el estudio del crecimiento de una o dos especies de insectos, particularmente dípteros, mientras que en las fases más avanzadas se utiliza la composición y grado de crecimiento de la comunidad de artrópodos encontrada en el cuerpo y se compara con patrones conocidos de sucesión de fauna para el hábitat y condiciones más próximas.
Las moscas metalizadas de color azul (Calliphora vicina) y verde (Lucilia sericata) que pertenecen a la familia Calliphoridae, tienen un olfato altamente desarrollado, pueden llegar a detectar olores a tres kilómetros a la redonda y por eso son las más rápidas en colonizar los cuerpos humanos fallecidos, “ellas llegan en las primeras horas de la muerte. Posteriormente, dependiendo del estado de descomposición del cadáver, la comunidad de insectos y otros artrópodos cambia. Generalmente en las primeras etapas de descomposición predominan las moscas, mientras que en las etapas finales se encuentran cucarrones y arácnidos como garrapatas, arañas y ácaros”